¡Qué maravilla, Arvikis!. Se me antoja como un pequeño paraíso. Me llama poderosamente la atención la blancura de todas las casas, un blanco diferente al de los pueblos cordobeses, un blanco mar... precioso. Me encantan las callejas que retratas y me gusta que le dediques una sección especial a los faroles, eternos acompañantes de paseos nocturnos que siempre dotan al paisaje de un aire más romántico. Gracias a tus fotografías, estoy deseando conocer este lugar. Existen tantos lugares para descubrir en nuestra geografía...
Unas fotos muy buenas. Es un pueblo de cuento y las imágenes que tú nos ofreces son un motivo perfecto para cualquier mural de cerámica. Son muy inspiradoras. Gracias
4 comentarios:
¡Qué maravilla, Arvikis!. Se me antoja como un pequeño paraíso. Me llama poderosamente la atención la blancura de todas las casas, un blanco diferente al de los pueblos cordobeses, un blanco mar... precioso. Me encantan las callejas que retratas y me gusta que le dediques una sección especial a los faroles, eternos acompañantes de paseos nocturnos que siempre dotan al paisaje de un aire más romántico. Gracias a tus fotografías, estoy deseando conocer este lugar. Existen tantos lugares para descubrir en nuestra geografía...
Gracias por tus comentarios Marcos.
Un saludo
Javier
Unas fotos muy buenas. Es un pueblo de cuento y las imágenes que tú nos ofreces son un motivo perfecto para cualquier mural de cerámica. Son muy inspiradoras.
Gracias
Qué blancura!!!me quedan pocas palabras después del comentario de Marcos. Seguro que maravilloso sitio.
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